jueves, 27 de octubre de 2016

ESTE JUEVES: DETRÁS DE LA PUERTA





Atraviesa la puerta… Y EMPIEZA TU HISTORIA
Esta es la propuesta que nos hace nuestro anfitrión de esta semana Pedro Pablo
Apartó la cortina raída que cubría la puerta de madera provocando una fina lluvia de polvo que con el paso de los años se había ido posando entre la trama de sus hilos. Abrió la puerta que soltó una especie de quejido desde sus goznes tanto tiempo lacrados. Se había prometido no volver a entrar en aquella habitación. Tuvo que esperar unos minutos a que sus ojos se adaptaran a la oscuridad. No sabía qué le estaba impulsando a romper la promesa que se había hecho a sí mismo. No, no volvería a remover aquellos dolorosos recuerdos. Por un instante estuvo tentado de darse la vuelta y salir de allí pero algo le detuvo, un olor. Cómo era posible que aún permaneciera aquel aroma que tanto evocaba en su memoria. Se dirigió a la ventana y descorrió las pesadas telas del cortinaje que cedieron a su mano con solicitud, como si la hubiesen estado esperando. Abrió los tapaluces y un presuroso rayo de sol inundó la estancia que pareció desperezarse ante la claridad ausente durante tantos años. Desde la ventana miró el camino serpenteante que se perdía en el bosque y se giró con lentitud, temeroso de enfrentarse de nuevo a un pasado que intentaba olvidar Su mirada fue recorriendo las paredes sin premura, observando cada escena plasmada en los lienzos antiguos, posándose en cada objeto, deteniéndose en recuerdos que en otro tiempo fueron causa de sus temores. Había tanto que olvidar para poder emprender de nuevo el camino.
Estuvo sentado junto a la ventana hasta que comenzó a atardecer, la luz se tornó rojiza y a lo lejos se oyeron graznidos de patos de una bandada que surcaba el cielo en busca de tierras cálidas. Se había abstraído de tal forma que al volver a la realidad no supo qué hacía en aquel lugar ni cuánto tiempo llevaba allí. Cerró la ventana y el cuarto volvió a sumergirse en la oscuridad. Al llegar al salón vio dos tazas de humeante chocolate y supo que era la hora de continuar con su vida dejando en el pasado todo lo que le impedía seguir adelante. Ella, con un gesto de su mano, le señaló  que se sentara a su lado y adivinó que la vida volvía a darle otra oportunidad.  El mostraba una esperanzada sonrisa y sus miradas se quedaron largamente prendidas de un sueño.

martes, 25 de octubre de 2016

CONTANDO LAS SEMANAS





Semana 45 inspirados en Azul terciopelo.


Inmenso, infinito manto etéreo 
de estrellas salpicado
sutil velo azul terciopelo 
lienzo del cielo colgado
horizonte de miradas 
suspiro de enamorados
sendero de la luna tornadiza

testigo de besos robados
de abrazos soñados cómplice
confidente de amores ansiados
velador de ocultos deseos
manto de cielo estrellado
manto de azul terciopelo
testigo de mis quebrantos







domingo, 23 de octubre de 2016

IMAGEN INSPIRADORA




Había dos amigos que vivían en el mismo pueblo. Era un pueblo pequeño, de apenas un centenar de vecinos que se desvivían por tenerlo siempre bien limpio, con las paredes relucientes por la cal que según los antiguos es lo mejor para dar blancura y al mismo tiempo desinfectar. Los muchachos habían sido compañeros desde siempre, habían nacido el mismo año, el mismo mes y hasta el mismo día.  Se criaron juntos, juntos dieron sus primeros pasos alrededor de sus madres que bajaban a lavar al río, y juntos aprendieron sus primeras palabras, algunas que solo ellos eran capaces de entender. Sus casas estaban una a cada lado de la iglesia y a ambos les atraía tanto el sonido de las campanas que se hicieron monaguillos para poder subir al campanario y poner su mano sobre el bronce que les transmitía una especie de calambrazo. Sin embargo, y a pesar de todo lo que tenían en común, eran muy diferentes, y aunque los dos eran de piel blanquecina, uno tenía el pelo rojizo, color que se intensificaba con el calor del verano, y el otro era rubio platinado, llegando a ser casi dorado a la luz del sol.  Pero lo que más los diferenciaba era su forma de ser, uno era dulce en el trato y tranquilo en sus acciones, mientras que el otro siempre fue nervioso y de carácter agrio. Para todos fue como un milagro que en la esquina de la iglesia, a medio camino entre las casas de los dos amigos, y junto a un banco donde solían quedar los muchachos, creciera un árbol del que brotaban dos ramajes ahorquillados, dando a un lado naranjas y limones al otro lado. Los vecinos acabaron llamándolo el árbol de los monaguillos porque al ver a los chiquillos bajo sus ramas parecía que acabaran de desprenderse de las mismas.



 Relato inspirado en una imagen propuesta por Carmen Utrera. Trabajo para la Tertulia Rayuela.




miércoles, 19 de octubre de 2016

ESTE JUEVES:¿QUÉ HACE ESTO AQUÍ?





Yo iba conduciendo, me acercaba a la zona del parque desde la calle General Pujales cuando delante de mí, como una imitación burlona de aquella famosa fotografía del grupo musical de Liverpool, en este caso se sumó uno más, cinco patos cruzaban la calzada con su patoso caminar, con esa forma característica de dar sus pasitos, ese ir poniendo una pata delante de la otra provocando que la parte trasera del cuerpo responda con un balanceo alegre, como juguetonas jovencitas al pasar por delante de un grupo de muchachos que exhalan el humo de sus primeros cigarrillos. Cruzaban lentamente, al ritmo que le permiten sus cortas extremidades, ajenos al peligro de los coches cuyos conductores suelen pasar por ahí pendientes de los vehículos que se acercan desde otras calles. Ya era una situación habitual verlos bañándose en la fuente pero esta fue la primera vez que los veía enfilándola.
Por supuesto que lo puse en conocimiento de las autoridades, y no solo porque podían causar un accidente sino porque corrían un grave peligro de ser atropellados. Para evitar nuevas excursiones, la fuente de los patos que se encuentra en el centro del parque, fue rodeada por una valla. Pero no creáis que eso impide que salgan del recinto, porque han aprendido a levantar el vuelo y saltar sobre la misma. No hay rejas cuando se desea ardientemente ser libre. 










martes, 18 de octubre de 2016

CONTANDO LAS SEMANAS




Semana 42 inspirados en el tema Humanidad.


                      Hemos imaginado senderos de esperanza
                      Unidas nuestras almas recorriendo el camino de la eternidad
                      Marcando días en el calendario de la vida
                      Ansiando cumplir los mismos sueños
                      Navegando por mares de plateada tranquilidad
                      Iniciando cada día con la ilusión del primer amanecer juntos
                      Dedicándonos el uno al otro con una pasión ya olvidada
                      Amándonos con la generosidad del amor desinteresado
                      Demostrándonos con cada gesto la verdadera esencia de la humanidad





martes, 11 de octubre de 2016

CONTANDO LAS SEMANAS




Semana 41 inspirados en "la rosa".

Florecía la rosa hermosa

Presumía cada día abriéndose al cielo
 por los cálidos rayos de sol acariciada
embellecida por el rocío mañanero

Admirada por cuantos la miraban
desplegaba sus pétalos orgullosa
alegraba la vida y la prolongaba

Celoso el jardinero de la rosa
la imaginó en la noche solitaria
y a la luz de la luna, enamorada
 ofreciera sus dulces néctares a otras bocas

Y arrancó la rosa de su rama
La quiso esconder de otras miradas
 Hoy agoniza atrapada en un cristal
donde va perdiendo lozanía

Se marchita la rosa olvidada en su encierro





miércoles, 5 de octubre de 2016

ESTE JUEVES: HOMENAJE A LA MEDICINA Y SUS PROFESIONALES




Quién podría hablar mejor y con más agradecimiento de la medicina y de todos sus profesionales que alguien que como podéis ver en la imagen ha tenido que verse enganchada a una máquina que, aunque tenía la misión de salvar la vida, lo cierto es que con cada chute me sentía morir. Fue una época que vista desde la distancia parece que no me haya ocurrido. Después de las primeras sesiones mi cuerpo era un despojo humano. Perdido el apetito por las continuas nauseas y vomiteras, de día y de noche, no tenía fuerzas para tirar de mí. Y luego el pelo, cuando se empezó a caer a manojos y tomé la decisión de raparme para no amanecer cada día con una almohada peluda mientras mi cabeza iba mostrando una piel que desde mi niñez más temprana se había ocultado a mis ojos. 
Pero lo peor de todo no son los malos ratos que te provoca la quimio, ni las consecuencias de su agresión, ni siquiera es el saber que tienes un diagnóstico que asusta, lo peor es que no sabes si podrás superarlo, si habrá solución, si hay esperanzas, si se han dado casos anteriores con buen pronóstico. Y sí, aunque al principio nadie quiere dar porcentajes, ni hablar de la gravedad de tu caso, llega un momento en que un equipo médico se reúne para estudiar tu situación personal y con una llamada de teléfono, la más esperada y la más temida, te comunican que se hacen cargo de ti, que se interrumpa la quimio y que te prepares para estar fuerte y animada a la hora de entrar en quirófano. Y qué puedo decir de ellos, los mejores, el equipo de cirugía hepato-biliar del hospital Virgen del Rocío de Sevilla. Una intervención que se preveía muy complicada, y que lo sería, pero que ellos con su gran profesionalidad solventaron en mucho menos tiempo del previsto. La recuperación fue rápida, los resultados inmejorables y lo mejor que no había que volver a la quimio. Para asegurase la total desaparición de células malignas, si hubieran quedado algunas, se optó por la radioterapia mucho menos agresiva y sin efectos secundarios tan molestos.  No tengo palabras de agradecimiento para todos los que estuvieron a mi lado en aquellos meses. Y ahora me encuentro como si nunca hubiera estado enferma, solo los controles semestrales me recuerdan que la vida hay que vivirla con intensidad, con la certeza de que hay que aprovechar cada momento. Se olvidan los miedos, los terribles dolores, los días interminables en cuidados intensivos, las incomodidades de los tubos y goteros. Recuerdo que en aquellas horas de soledad intentaba no pensar y sentir el aire del colchón que se iba desplazando por mi espalda, mis nalgas, mis piernas, y luego vuelta atrás, así una y otra vez hasta que el sueño, inducido en parte por la morfina, me hacía perder por un rato la conciencia. 



Un gran equipo.







CONTANDO LAS SEMANAS





Semana 40 inspirados en el título de una canción, "Ojalá"


Dadme sonrisas para coser mis tristezas
ofrécedme sueños para seguir despierta
mostradme nubes para imaginar
cobijadme en un rincón donde convalecer
dadme vuestras manos si caigo
caminad a mi lado por si dudo
iluminad mis noches negras
leed en mi ojos si peno
Y ojalá seáis recompensados
infinitamente por vuestra generosidad  



Ojalá tengáis una linda semana. Estamos de nuevo aquí.




sábado, 1 de octubre de 2016

CERRANDO LA CONVOCATORIA DEL JUEVES 29 DE SEPTIEMBRE




Tres generaciones haciendo roscos de limón.  Año 2011.
Mi hija Elisabet, mi nieta Paula y yo.


Ya me toca cerrar esta convocatoria y pasar el testigo a nuestro amigo Juan Carlos que nos convoca para el jueves día 6 de octubre. Quiero agradecer a todos los jueveros que me han acompañado y a los que no han podido pero nos han visitado y dejado sus comentarios. Hemos tenido una gran variedad de recuerdos, en algunos casos similares, con nuestras abuelas siempre presentes cuando nos perdemos en aquella niñez tan añorada. Hemos olido un exquisito guiso de lentejas, hecho con mucho cariño, como se debe hacer siempre, a fuego amoroso, con unos polvos mágicos, así nos ha contado Montserrat. Estuvimos en una cocina con cuatro generaciones haciendo "nuégados", que salieron tan ricos como los que se hacían en Membrilla. Tracy volvió por unos minutos a la cocina de su abuela para pelar y machacar los ajos del cocido. Con Alma sí que hemos cocinado con amor, una receta que no solo alimenta el cuerpo, también el espíritu, una receta que satisface plenamente. Mónica nos ha hecho sentir en verso, y no me digáis que no os habéis relamido con las exquisiteces que nos ha nombrado Juan en su relato, con ese divertido final que a todos nos ha sorprendido. Y qué decir de las letras que nos envuelven con esa poesía que identifica cada escrito de Rosa, aquella época de madres prestidigitadoras que lograban hacer tortillas sin huevo y llenaban nuestros sentidos con los olores y sabores de las especias dulces, del azúcar haciéndose caramelo, de los guisos cocinados al amor del carbón. En la cocina de Juan Carlos se han guisado mil y una sopas que han logrado que un papanatas engreído haya sucumbido sin saber que cada una de ellas era el método de Cherri para olvidarse de la insatisfacción que el muy torpe no lograba solucionar. Las natillas de la madre de Carmen, tan parecidas a todas nuestras natillas, que nos evocan los mismos recuerdos y hasta podemos saborearlas, qué suerte tenemos de poseer esos momentos grabados en nuestra mente y guardados en el corazón. Y cómo voy a olvidarme del erotismo que nos han relatado Yessy Kan mientras se preparaba ese sushi que tuvimos que dejar para después de los besos, o las ansias devoradoras de María Perlada, dispuesta a disfrutar sin miedos, decidida a tocar el cielo al morir solo un poquito, y por último nuestro querido amigo Dermiurgo que no se inspiraba pero que al final el guardapolvo (que algo tendrá que ver el nombre de la prenda) de una científica y una receta más de laboratorio que  de cocina, le han despertado a las musas y nos ha obsequiado con un capítulo nuevo de Anita Zinc. 

Hasta una próxima vez y nos seguimos encontrando los jueves en los blogs de los anfitriones.

Un abrazo a todos mis amigos jueveros.

Leonor